Ilusiones.

Las personas, tenemos un defecto, el defecto de ilusionarnos con la tontería más simple, y a la vez la más compleja que pueda existir.Cuando sentimos ilusión por tener un objeto, por querer a una persona, o por que esa persona nos quiera a nosotros, estamos tan sumamente cegados en el fin al que queremos llegar que los medios no nos importan, claro está , la mayoría de esas veces tampoco pensamos en las consecuencias, pueden que sean buenas, pueden que sean malas, pero serán consecuencias igualmente. Por eso, como las ilusiones pueden acabar desmoronándose, yo he llegado a un punto de mi vida en el que prefiero no hacerme ilusiones, porque aunque todo lo que merece la pena en la vida cueste, no quiero que al conseguirlo, se desmorone por una ilusión mal hecha, y creo, sinceramente, que es lo mejor.